Juan David Valderrama dice que compite por la Alcaldía con una candidatura cívica y alternativa.
Juan David Valderrama confía en que esta vez podrá consolidar las alianzas que no logró cuajar hace 4 años.
Valderrama está en la tarea de armar una candidatura única que se distancie de los extremos en los que hoy se visualiza la campaña a la Alcaldía de Medellín.
Y sostiene que el momento que hoy vive la ciudad es muy similar al de 2003 cuando Luis Pérez gobernó y en medio de las denuncias de un mala administración y el cansancio ciudadano surgió una candidatura cívica que logró encausar el manejo de Medellín.
Juan David Valderrama usted se lanzó hace cuatro años. ¿Por qué cree que hoy sí puede ser alcalde?
“Uno, tenemos la experiencia ya demostrada en varios cargos, he demostrado capacidad de ejecución de proyectos muy bonitos que se mantienen a pesar del tiempo. Dos, me sé rodear de gente inteligente, no me cuesta escuchar. Y por último, no tenemos ninguna investigación.
Tenemos los méritos técnicos, rigurosos y éticos para participar. Y por último, digamos, la campaña pasada tenía un contexto muy distinto.
Me enfrenté a un alcalde muy popular, con su candidato que era Santiago Gómez, al de (Álvaro) Uribe que era Alfredo Ramos, y ya cuando la ciudad se polariza, la campaña de Alfredo le apuesta a dividirnos.
Terminar la campaña con mucho esfuerzo. No encontramos con quién aliarnos, que también fue otro aprendizaje”.
Se le ha visto en conversaciones con el concejal Daniel Duque, Luis Bernardo Vélez… ¿Hay posibilidad de una coalición?
“Sí, pero es con César Hernández y con Luis Peláez que hemos conversado y con Lucía González que no es candidata. Yo con el Partido Verde tengo una línea roja, no con Daniel Duque, sino con el partido al que él pertenece en la actual coyuntura porque es un partido parcializado con Quintero.
Tiene demasiadas cuotas en la alcaldía y digamos para mí la línea roja es Daniel Quintero y sus aliados y en gran parte el Partido Verde está ahí. Luis Bernardo decidió que quiere continuar su camino solo.
Queremos darle a Medellín una opción distinta a los extremos para que haya una propuesta más cívica, más alternativa para la Alcaldía”.
Y qué garantiza que no vaya a pasar lo mismo de hace 4 años, que la contienda se polarizó…
“Si logramos esta unión que estamos trabajando en torno a los principios, a los valores que queremos recuperar de la sociedad nuestra, creemos que mucha gente nos va a ver como una opción real, con opción de ganar.
Antes no conversábamos, hoy ya somos capaces de dejar de lado ese ego para poner a Medellín por encima de todos y también entendemos que no queremos que Medellín quede entre dos opciones, porque eso al final del día, afecta al ciudadano.
Estamos buscando cómo logramos un acuerdo. Primero, en una candidatura única y dos, una lista del Concejo conjunta de coalición”.
Lucía González decía que recuperar a Medellín iba a ser muy difícil. ¿Qué requeriría un alcalde para conseguirlo?
“Hay varias dificultades muy básicas. La gente de Medellín conocía una ciudad que siempre estaba limpia, con una buena malla vial. Me explico, los jardines estaban siempre bonitos.
Cuando la gente ve que eso ya no pasa, entiende que hay un deterioro muy grande y lo comunica y lo asemeja con el alcalde de turno, que obviamente sabemos que ha sido una administración nefasta para la ciudad.
Siento que la gente está buscando volver a los valores que nos reconocían como paisas, la pujanza, la palabra, la honestidad y ser solidarios.
Y eso en Medellín se ha ido perdiendo, y una alcaldía que se ha dedicado a desunir, a pelear, agota mucho al ciudadano”.
Un gobernante tiene esa capacidad, así la gente no lo entienda, de permear la comunidad que gobierna con su lenguaje. ¿Qué ofrece usted?
“Tenemos una mirada muy de equipo. No queremos más caudillos, no creemos que una persona sola solucione los problemas”.
¿Cómo se puede competir con otros candidatos que han demostrado tener gran capacidad económica para hacer campaña como Albert Corredor o Juan Carlos Upegui, ¿Hay financiación suficiente para los candidatos independientes como usted?
“La competencia es muy desigual en lo económico pero también es desigual en el conocimiento y en la pasión.
Nosotros tenemos conocimiento, pasión y convicción por Medellín, ellos tienen mucha plata pero no les importa la ciudad, no se conectan, no les importa entender qué pasa y el ciudadano de Medellín no es bobo.
La gente empieza a entender las dinámicas, quién mueve plata, quién ofrece sancochos y saben que al final el que compra un voto ese no va a resolver los problemas.
Yo siento hoy a Medellín en una coyuntura parecida a la del 2003 con Luis Pérez de alcalde y en una situación de supuestos temas de corrupción, muy parecido a Daniel Quintero.
La ciudad se juntó en torno a una propuesta cívica alternativa con muchas capacidades de conectar y de escuchar y logró llegar al poder de forma contundente con pocos recursos pero con mucho talento, muchas capacidades y mucha convicción”.