El Ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, ha hablado sobre la propuesta de ley de sometimiento del Gobierno Nacional, la cual ha generado controversia en varios sectores políticos. El objetivo de esta ley es negociar con bandas criminales y delincuentes comunes, incluyendo narcotraficantes, para lograr la paz en el país. Sin embargo, hay recelo acerca de si esto puede dar lugar a alivios en penas o incluso impunidad para los delincuentes.
A pesar de las críticas, el Ministro ha asegurado que es necesario negociar con estos actores del conflicto, no solo con los políticos. Según él, si no se incluyen a los delincuentes en los intentos de diálogo, Colombia no podrá alcanzar la paz. El sometimiento implica negociar para que los criminales se presenten ante los jueces, entreguen a sus cómplices, las rutas del narcotráfico y parte de los bienes y dinero que poseen, a cambio de mejores condiciones.
Velasco ha manifestado que, en su opinión, la ley de sometimiento podría ser más generosa, aunque acepta que es una idea difícil de aceptar en Colombia. Ha hecho una salvedad entre las negociaciones políticas que se entablan con guerrillas y el sometimiento que se busca con delincuentes comunes, la mayoría dedicados al narcotráfico. En su entrevista, Velasco recordó las negociaciones con los paramilitares hechas por el expresidente Uribe y aseguró que en el código penal colombiano existen figuras que hablan sobre el sometimiento.
El Ministro ha enfatizado que el objetivo de la ley de sometimiento es acabar con la violencia y negociar bajo las condiciones del Gobierno para lograr que los criminales confiesen y desmonten sus organizaciones dedicadas al narcotráfico. Para él, la paz es un elemento central, no solo de convivencia, sino de crecimiento económico, y es a lo que le apuesta el gobierno de Gustavo Petro.